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Nuestra historia

Un sueño llamado Paraíso, hecho realidad.

Con el propósito de ayudar a las personas con problemas de adicción en el alcohol, las drogas, y la ludopatía se inicia un proyecto desde el corazón y con las mejores intenciones de apoyar esta población. Este proyecto desde sus inicios, tuvo como prioridad darle a la persona adicta un espacio acogedor, terapéutico y sobre todo que velara por la dignidad del ser humano.

 

Su nacimiento y realización tuvo origen el 19 de octubre del 2013, en la vereda el machete municipio de Barbosa, finca el paraíso y su nombre inicial fue Fundación Filipense 4:13 con el eslogan todo lo puedo en cristo que me fortalece.


Iniciaron 12 usuarios, y a los 15 días de abrir puertas ya contábamos con 35 personas. La mayoría de residentes eran recibidos sin recursos económicos y unos pocos tenían la capacidad de pagar el tratamiento. Para sostenernos económicamente montamos una fábrica de arepas, compramos todo el entable y dos motos para la distribución de dicho producto, y tres meses después, los mismos usuarios se robaron todo el entable y las motos.

 

Fue un momento muy difícil para nosotros, el resto de usuarios con el fin de que la Fundación no se acabara, propusieron colocar una fábrica de chocolates y con mucho esfuerzo conseguimos todo lo necesario para poder producirlos y venderlos. Los jóvenes salían con unas canastas de mimbre, vendían en los buses y con este dinero podíamos cubrir los gastos básicos como: arriendo, comida y servicios. Así logramos sostenernos todo el año.

 

Para agosto del 2014 se legalizó la Fundación, asignándole el nombre de Fundación Teoterapéutica el Paraíso, con el eslogan "un hogar de ayuda al adicto". 

 

Desde  sus inicios  las terapias espirituales, ocupacionales, educativas y deportivas, fueron los pilares en la rehabilitación de las personas, que buscaban reeducarse y resocializarse. Se iniciaba el día Con un devocional, luego del desayuno los residentes más antiguos en la Fundación salían a comercializar los bombones de chocolate en todos los municipios aledaños y los residentes que se quedaban en el hogar, participaban en las actividades educativas y demás terapias incluidas en el programa.


Los residentes que estaban fuera del hogar regresaban en la tarde y con el grupo completo se hacia el encuentro de la tarde, para saber sus estados de ánimo y las problemáticas que habían enfrentado en el transcurrir del día. Gracias al gran deseo de continuar con este proyecto, por medio del cual se estaban salvando y rescatando un número importante de personas, trasladamos la Fundación a la llamada  "Lomita dos" en Barbosa y luego nos reubicamos en el municipio de Girardota a la vereda la meseta. para poder optimizar los pocos recursos.

 

 

Acá contábamos con 12 usuarios y un operador terapéutico. No se contaba con ningún apoyo externo ni ningún contrato con municipios o alcaldías. En efecto, la situación económica se tornó muy difícil para la sostenibilidad del hogar, viéndonos en la dolorosa situación de cerrar las instalaciones en diciembre del 2015 y posponer este proyecto.


Pasó el tiempo y a pesar de las adversidades, pero con el deseo inquebrantable de querer ayudar a las personas que se encontraban en situaciones adversas debido al consumo de sustancias psicoactivas, la directora y fundadora Doña Alba Londoño Ruíz, Alejandro Escobar Londoño y  el terapeuta Jairo Muñoz, reabren las puertas de la Fundación el Paraíso el 10 de enero de del 2017; con el contrato de la alcaldía de Girardota para seis usuarios beneficiarios y cinco particulares con los que se reanuda este proyecto. Esta vez, nos ubicamos en la vereda Manga Arriba.


Seguimos con este sueño,  que ahora es más una realidad, gracias a un nuevo enfoque, un nuevo aire terapéutico y un nuevo y ampliado equipo de trabajo que han posibilitado que esa semilla llamada el Paraíso, empiece a dar sus frutos y se germine una nueva esperanza para aquellas personas que por diversas adversidades, no encontraban una solución a sus problemáticas, y que ahora pueden albergar una nueva esperanza de vida.


Para el año 2017, se fortalece este proyecto con enfoques y acciones sólidas y confiables, vinculando más personas y entidades que por el tipo de tratamiento, ven a la Fundación el Paraíso como la opción más acertada para sus problemáticas de consumo y adicción. Para el segundo semestre de ese año, con el Programa del habitante de calle, del municipio de Copacabana, llegan otros 6 beneficiarios y más particulares. Para esta fecha el número de personas que han acudido a la ayuda de esta problemática entre las dos alcaldías vinculadas y los particulares, superan las 35 y al terminar el año son  más de 50.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 


 

En el año 2018, seguimos creciendo y ampliando la cobertura de nuestra Fundación, se hacen adaptaciones de las instalaciones en las que estábamos ubicados, hasta que la comunidad desborda la capacidad de la Finca en la vereda Manga Arriba, momento en el que se inicia la búsqueda de espacios más amplios y adecuados. Para finales de ese año, ubicamos una finca en el sector de Juan Cojo, finca el Rancho. La cual tiene capacidad para 60 usuarios aproximadamente.

 

Actualmente nos ubicamos en la Carrera 14 # 15-313 vereda Juan Cojo, Girardota-Antioquia. Ahora tenemos una Dirección general, Coordinación terapéutica, Equipo de operadores, Practicantes y Auxiliar contable. Contamos con un promedio de 50 usuarios entre beneficiaros y particulares, con quienes continuamos el propósito original de la Fundación, que es ayudar a las personas azotadas por el flagelo del alcoholismo, la ludopatía y la drogadicción. Buscando que los usuarios puedan renovar su espiritualidad, reconstruir su autoestima y hacer un acercamiento familiar, para luego poder integrarse de nuevo a la sociedad.

La Fundación Teo-terapéutica, es un hogar de puertas abiertas y de ayuda a las personas con problemas de uso y abuso de sustancias psicoactivas, alcoholismo y conductas disfuncionales.

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